El problema radica, en que uno se levanta a las ocho de la mañana, prende la radio, ceba unos mates, programa de la radio nacional de tango, que claro, ahora también es de folklore.
Elo aquí el problema: PASAN FOLCKLORE: ¿me explico? Termina el turno de Goyeneche, saltamos a Piazolla y vamos cerrando con los Chalchaleros o algo de la Sole
¿Donde se a ha visto? ¿O mejor dicho, escuchado?
Digo, el folklore viene con la fuerza del terruño, con todo lo que se concibe a partir de ello, relegado al campo. Sus sonidos son otros, sus melodías, sus temas. Algo muy de provincia y lejos de la ciudad
Es una cuestión de federalismo parcial, es decir, la soberanía provincial del interior manifestada en la contención y el mantenimiento de su costumbre anterior. No, no es así, lo lamentamos, pero no.
La preferencia no va del lado global o del lado regional. El problema radica en tratar de conciliar ambas partes, ¿pasamos tango o pasamos folklore? ¿pizza o empanada?
Pero no seamos tan asquerosamente eclécticos de pasar un poquito de ambas o de hecharle un poquito de carne picada a la pizza, porque simplemente no han de combinar.
Y con esto vamos a que en alguna ciudad argenta que no sea capital federal, el mate se toma dulce, y el tango se escucha a medias..somos pseudo provincia, y nos enoja que nos digan menducos.
Tratamos de emular alguna costumbre barrial de san Telmo, pero la Sole nos lo impide, y no que elijas una, la otra, ambas o ninguna. La radio va a tratar de conciliar estas cuatro posibles opciones, para que no te sientas excluido de la movida, para que no te sientas mal ni con tu federalismo ni con tu posmodernidad, para que estés cómodo y pienses che que bueno q tá esto, mientras cebas unos mates y no sabes como la cagas..
No hay comentarios:
Publicar un comentario